viernes, 18 de septiembre de 2009

ANDRÉ COMPTE-SPONVILLE. "Lucrecio. La miel y la absenta" (Paidós)

«Lucrecio, filósofo epicúreo, es también un grandioso poeta. La paradoja estriba en que parece tomar perpetuamente el epicureismo a contrapié, como si el poeta, en él, refutara al filósofo, a menos que suceda al revés. Eso es lo que he intentado expresar (especialmente al volver a traducir los más hermosos pasajes de su obra maestra) y comprender. De la filosofía de Epicuro, la más luminosa, la más apacible, la más serena y quizá la más hermosa de toda la Antigüedad, Lucrecio ha extraído el poema más sombrío, más áspero, más angustiado y más trágico. Desde luego, eso nos dice algo acerca del hombre que fue, pero también acerca del epicureismo, de la filosofía y de nosotros mismos. Si fuéramos sabios, no tendríamos necesidad de poetas. Pero ¿acaso tendríamos necesidad de filósofos?»